Inspiración

para tu mes de enero
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Feliz año nuevo! Les escribo desde el bosque. Me vine a Cariló por unos días con novio y gatita, pues #nuncaparardemoverse (aparentemente) Yo no sé si fue el movimiento infinito del año pasado (físico y emocional) o qué, pero siento que la Sofi de Enero 2023 ve las cosas muy distintas a la de Enero 2022. Y por eso quiero hacer un shot de inspiración un poco distinto. Bueno, creo que este año voy a hacer todo de una forma un poco distinta, ya van a ver. Les va a copar.

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Este Shot viene en forma de carta, porque quiero contarles algo que me pasó. El lunes pasado (2 de Enero) asistí a una charla virtual con Elizabeth Gilbert, una de mis referentes totales cuando se trata de pensar el proceso creativo. Seguramente me hayan escuchado hablar del tema, porque #fan. El punto es que en poco más de una hora y media, esta señora me dio vuelta cual media. Porque me pasé la vida buscando el por qué de las cosas, tratando de conectar con mi propósito como emprendedora, como creadora, e incentivando a otrxs a buscar el suyo. Y de repente me ayudó a ver que todo ese esfuerzo podría ser casi inútil. O hasta un signo de soberbia.

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Alguna vez escucharon hablar de ikigai? Creo que desde que arranqué Notan tengo puesta la camiseta del ikigai. Era como mi religión, más o menos. Y de repente vino esta señora a proponerme que viviera un año sin un propósito. Sin un objetivo mayor. “Quién te creés que sos para asumir que tu vida tiene un propósito grande? Qué te hace pensar que estás acá para cambiar al mundo” Pará, cómo?!Elizabeth Gilbert plantea que la búsqueda del propósito mayor nos lleva a un sentimiento de escasez. Según ella, y en esto coincido, es casi imposible estar SIEMPRE trabajando hacia un propósito que vaya a cambiar al mundo. Cargar con tanta responsabilidad no puede hacer otra cosa que trabarnos y hacernos sentir que ningún esfuerzo va a ser suficiente.
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Crecimos en una sociedad que premia la “productividad”, el hacer constante. Avanzar, siempre, a pesar de todo. Desconectados de la curiosidad y la experimentación, porque todo tiene que hacerse por y para algo (útil). La realidad es que si queremos vivir una vida creativa, no hay nada peor que la presión del “éxito”

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“No sé qué estoy haciendo, y es el no saber lo que lo hace interesante” – Phillip Glass

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Entonces frená. «Confiá en las misteriosas formas del proceso creativo” Hacé lo tuyo – lo que disfrutes, lo que te genere placer y alimente tu curiosidad – y cuando tus habilidades sean requeridas (por Dios, el Universo, la energía creativa, o como quieras llamarlo), serás notificadx. Este fue el mensaje que nos dejó “Liz”, y que me dejó encendida. Esto no quiere decir que dejemos de proyectar nuestro año. No se trata de dejar de lado los hábitos, las ganas de trabajar. Pero sí permitirnos pausas, mesetas, y sobre todo afinar la sensibilidad y conectar con el deseo. Personalmente estoy muy en esa.

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“Una vida creativa no se define por lo que producís. Es una vida liderada por la curiosidad, no por el miedo” – Elizabeth Gilbert

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Te propongo que este 2023 pongas el foco en observar dónde estás invirtiendo tu tiempo, tu energía. A veces hay que dejar de hacer las cosas que nos gustan un poco, para poner más pila en las que realmente amamos hacer. En los archivos adjuntos de esta lección te comparto un ejercicio que saqué de la clase del lunes, para que reflexiones si te dan ganas.

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